

Cómo lograr que a tu perro le guste que le limpies las patas al volver del paseo
Si limpiarle las patas a tu perro al volver del paseo se ha convertido en una lucha diaria, o si simplemente notas que no le gusta (aunque se deja porque es un buenazo), este post te interesa. Lo escribe Alba Benítez, etóloga canina en SimiperroHABLARA.com, experta en hacer que los perros sean felices ????
No todos los perros toleran igual de bien el hecho de dejarse “manipular” (así es como le llamamos los etólogos y veterinarios al hecho de dejarse tocar, coger, explorar, etc.). A algunos no les importa, y otros incluso pueden gruñir o llegar a morder en determinadas situaciones.
Estos días, en los que es tan importante asegurar la máxima higiene, todos y todas estamos limpiándoles las patas a nuestros perros al volver del paseo. Pero hay quien no lo pone nada fácil…
¿Te suena alguna de estas situaciones?
- Tu perro te gruñe (o incluso ha intentado morderte) cuando intentas limpiarle
- Tu perro te esquiva cuando ve el trapo
- Tu perro se escabulle en cuanto entra por la puerta de casa
- Tu perro se deja limpiar, pero notas claramente que no disfruta el momento
¿Cómo convertir un momento desagradable en un momento disfrutable?
Te voy a dar algunas pautas para lograr que la limpieza de patas diaria deje de ser una pesadilla tanto para tu perro como para ti.
Ten en cuenta que muchos de estos consejos te servirán también en otras situaciones similares.
Al final, de lo que se trata es de lograr que, progresivamente, tu perro le vaya encontrando un beneficio claro al hecho de ser “sometido” a tus toqueteos para limpiarlo, asearlo, o incluso para mirarle una herida, un bulto sospechoso o cualquier otra cosa si algún día lo necesitas.
¿Qué necesitas?
Creer que sólo pueden morder los perros desconocidos o algunas razas en concreto es un pensamiento muy equivocado.
- Premios comestibles: si estos días no tienes a mano snacks caninos, puedes usar trocitos de frankfurt, jamón, queso (cuidado con las alergias a los lácteos) o bien algo más natural si a tu perro le gusta: manzana, pan, etc. La cuestión es que, lo que le des, sea realmente una recompensa de valor para tu perro. Y recuerda que los premios tienen que ser siempre trozos pequeños y fácilmente masticables para tu perro.
- Un trapo o bayeta húmeda: la que vayas a utilizar para limpiar las patas.
- Paciencia: como siempre, los ejercicios con tu perro hay que hacerlos de forma muy progresiva. Tienes que darle el tiempo que necesita para entender la nueva situación.
- Método: sigue las instrucciones que te indico a continuación.
Fase 1 – Pasos a seguir
Haz todo esto en casa, con tranquilidad, y NO justo al volver del paseo. Primero necesitas acostumbrar a tu perro. En la fase 2 podrás aplicarlo a la vuelta de la calle.
- 1. Ten los premios a mano, pero un poco escondidos para que tu perro no solo esté pendiente de seguirlos con su nariz.
- 2. Deja la bayeta o el trapo también a tu alcance.
- 3. Acércate a tu perro tranquilamente y acarícialo con naturalidad: Si notas que se siente molesto o invadido, relaja naturaliza la situación. Siéntate con él en el suelo, juega un poco o haz lo que creas necesario para destensarlo. La idea es que, finalmente, tu perro esté en predisposición de dejarse tocar por ti.
- 4. Cuando ya estés acariciando a tu perro, saca el trapo o la bayeta y déjalo cerca de tu perro. Permítele que lo huela si quiere.
- 5. Coloca algunos premios encima de la bayeta y deja que tu perro los coma.
- 6. Ve acercándole la bayeta húmeda y los premios poco a poco, con naturalidad. Que entienda que la bayeta no es “el enemigo”.
- 7. Si tu perro está tranquilo y va entendiendo el juego, ahora toca suavemente una de sus patas (aún no la cojas) y dale un premio.
- 8. Haz lo mismo varias veces y con todas las patas.
- 9. Ahora coje la bayeta y rózale la pata con ella, luego dale un premio.
- 10. Repite esto con el resto de patas.
- 11. Ahora coge una de las patas de tu perro con tu mano y dale un premio. Estate atento a cómo responde. Siempre tienes que hacerlo todo de forma muy gradual para no asustarlo ni molestarlo.
- 12. Repite lo mismo con el resto de patas.
- 13. Solo si tu perro está tolerando el ejercicio, coge la pata con la bayeta y rózala. Dale un premio.
- 14. Haz lo mismo con el resto de patas.
- 15. Si tu perro ha respondido bien al ejercicio, repítelo varias veces al día, fuera del contexto de la vuelta del paseo, simplemente para acostumbrarlo a ser limpiado por ti.
Sobre todo, recuerda que, para realizar la secuencia de ejercicios, tienes que ser muy paciente y hacerlo de forma gradual y progresiva. Siempre respetando el ritmo de tu perro.
Si ves que se incomoda en algún momento, para el ejercicio y retómalo en otro momento, desde el paso 1. Siempre con mucha paciencia. Si no, no alcanzarás tu objetivo.
Fase 2 – Pasos a seguir
Ahora ya puedes aplicar lo practicado en la fase 1 al momento de la vuelta del paseo.
- 16. Ten los premios a mano antes de entrar en casa al volver del paseo.
- 17. Saca un premio y muéstraselo a tu perro mientras coges la bayeta.
- 18. Límpiale las patas y mira cómo disfruta, o al menos tolera el momento ????
Desde BOONS esperamos que este post de Alba Benítez te ayude durante los días de confinamiento, y en muchas otras situaciones diarias con tu perro.
Si te ha parecido útil, envíaselo a quien creas que podrá ayudar también, para hacer que la vuelta del paseo sea un poco más agradable para todos. ¡Gracias!
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MARCOS
19/03/2020